Ir al contenido principal

Flores para Phlox, un poema para tres damas blancas

FLORES PARA PHLOX. Vino orgánico de Siurana d'Empordà creado por la gente inquieta de Vins de Taller de la D.O. Empordà. 

Phlox 2014 es más que un nombre y una añada ya que el número en esta ocasión va estrechamente vinculado a la alquimia del enólogo disfrazado de Celestina para decidir en esta edición 14 cuales integrantes van a ser invitados a mezclarse en la relación de amor que va a transcurrir en la botella como hogar hasta entregarse a los pocos afortunados que alcanzamos a conseguir su propiedad efímera.

Fhlox '14 es una tormentosa relación entre antagonismos, solo aparentes, que acaba en un feliz matrimonio entre dos damas blancas nacidas en las riberas del Ródano, Rousanne y Marsanne, ambas de mente abierta, con carácter distinto pero complementario que en su noche nupcial fermentativa invitan a la gran dama borgoñesa Chardonnay a un ménage à trois que no sería bien visto en Francia, estas cosas pasan en la Costa Brava, lo más cerca que se pueda del surrealismo daliniano del Alt Empordà. 

El resultado de esta fiesta de sensaciones son disfraces que se transforman en copa, ahora nariz, ahora boca, las flores que parecen manzanas asadas, sudores de alcohol, ratos en el desván y risas en el pajar, fiestas de vestido largo y muchos secretos que al final expresamos con una sonrisa... guardémonos los secretos para que mañana en la vinoteca no se hayan llevado todas las botellas que aún no han sido descubiertas y podamos repetir.

Phlox '14 logra uno de los más bellos poemas blancos de este 2015. 

La Cuenta: 10€
El Conteo: 9/10

Comentarios

Entradas populares de este blog

Olio di Sansa di oliva: Estafa en los anaqueles

¿Alguien me entiende cuando digo: " Setze jutges d'un jutjat mengen fetge d'un penjat "? En realidad no digo nada, es solo una frase para poner a prueba a los que intentan aprender pronunciación catalana. Pues bien este "trabalenguas" tiene un significado tan oculto como el producto que se esconde tras las etiquetas de botellas de " olio di sansa di oliva ". El mercado venezolano va a inundarse de este tipo de aceite "de oliva". La empresa que gestiona los permisos sanitarios de mis productos comentaba esta semana que en el Ministerio de Salud existía una gran cantidad de expedientes pendientes de aprobación de aceite de orujo de aceitunas. La razón principal es que el precio del aceite de oliva virgen ha subido mucho por la escasez provocada por las heladas del pasado invierno en la cuenca mediterranea, por tanto muchos importadores se han decidido a incorporar un subproducto derivado de la aceituna que podriamos catalogar como el más in...

Pedir la cuenta en un restaurante, un signo globalizado

¿Cómo pides la cuenta en un restaurante? De Barcelona a Toquio, de Nueva York a Buenos Aires, a menos que el camarero esté a nuestro lado y verbalicemos la petición, el signo que realizamos es un código fundamental de la cultura humana global: los dedos pulgar e índice unidos acompañado del movimiento rápido y en vaivén de la mano con el brazo ligeramente alzado hasta conseguir la atención y asentimiento del servicio del restaurante... por mucho que le doy vueltas, no encuentro otro signo gestual más universal y difundido que este, posiblemente solo superado por el SI o el NO gesticulado con la cabeza al comprobar si el contenido de la cuenta es el esperado.

Licor de Merda. el "secreto" mejor guardado

"El descanso del Guerrero" es el slogan publicitario del Licor más escatológico del mundo, de regalo con la compra de 3 botellas un práctico orinal El hombre ha utilizado a lo largo de la historia todo tipo de materias primas para la elaboración de licores, normalmente del reino vegetal, pero también en algunas fórmulas bien conocidas los protagonistas son del reino animal, insectos, gusanos, escorpiones, serpientes (recuerdo un licor de serpiente cobra que me regalaron desde Vietnam)... pero lo que nunca imaginé es que la materia prima pudiera ser tomada del propio ser humano y del principal de sus deshechos... la merda. Ayer en una despensa de licores me topé de frente con una botella de Licor de Merda de los años 70 que su propietario portugués guardaba como oro ya que años antes la habia conseguido en una licorería de Portugal. Para ese hombre fue la confirmación de un cuento antiguo que no acababa de creer y se hizo con un ejemplar pagando por ella una fuerte suma. A...