Yo soy catalán, en mi tierra la afición por los toros es minoritaria y en franca decadencia, no hace mucho la ciudad de Barcelona se declaró ciudad antitaurina motivada por la fuerza de los grupos de presión contra la "fiesta nacional". Era habitual ver en los alrededores de la plaza Monumental de la Gran Via de Les Corts enfrentamientos entre los críticos y los aficionados los dias de corrida.
Muchos catalanes han olvidado el arraigo y afición taurina de Barcelona antes de la Guerra civil española, luego, durante la dictadura las corridas de toros, el Real Madrid y otras perlas de la cultura andaluza se convirtieron en sinónimos propagandisticos del regimen de Franco y los catalanes acabaron rechazando la fiesta por dicha asociación política. La afición por los toros ya nunca se recuperó y los cosos catalanes acabaron siendo un reducto para los turistas extranjeros ávidos de asistir a una fiesta ancestral.
En mi caso, solo he asistido en una ocasión a la plaza de toros de Barcelona, más con la intención de hacer un buen reportaje fotográfico que por mi identificación con la fiesta. Pero para mi los toros tienen nombre y apellido: mi tata Juana
Juana se incorporó como empleada doméstica en casa cuando yo tenía 3 años y se fue jubilada cuando cumplí los 17 años. Una mujer andaluza por los cuatro costados, de Lebrija en la provincia de Sevilla, muy cerca de Jerez de la Frontera. Juana es amada por toda la familia y para mis hermanos y yo es una referencia moral. Para todos nosotros es la mejor cocinera de nuestras vidas porque convertía la comida cotidiana en un festín incomparable... desde unas simples patatas fritas a todo el elenco de la cocina andaluza, del boquerón en esabeche al cocido, Juana representa la cocina tradicional mejor entendida y perfectamente elaborada gracias a los ingredientes más básicos; amor, sabiduría y practicidad.
Juana tenía sus aficiones personales muy definidas, cantaba flamenco y tonadillas en la cocina mientras guisaba, los viernes la televisión era para ella ya que le encantaba ver un concurso muy popular en España, el Un, Dos, Tres... Responda Otra vez... y por encima de todo, cuando se celebraba una corrida de toros en la televisión no se la perdía, especialmente si era en la Maestranza de Sevilla, la verdadera catedral del toreo.
Juana me enseñó a entender la faena del torero, me encantaba sentarme a su lado para ver como vibraba con los buenos muletazos y más de una vez lloró de emoción con las faenas de su matador favorito, Curro Romero
Hoy mientras escribía mis sensaciones sobre la Feria de Valencia recordé la figura de Curro Romero y como a través de los ojos de Juana pude vibrar con sus mejores tardes. Encontré su sitio oficial en internet http://www.curro-romero.com/ y en las ultimas dos horas he disfrutado con la épica de este matador mitológico.
¡¡¡ Va por ti, Juana !!!!!
La plaza se pone en pie. Toda la plaza inundada de pañuelos blancos, ¿De dónde salen tantos pañuelos?, ¿no dicen que ya no se usan?. Es falso, se piden las dos orejas. ¡Qué faenón de Curro a cámara lenta!, ¡Qué apuntes!, ¡Qué arte efímero!, ¡Qué belleza!. Se piden las dos orejas. No vemos el pañuelo del presidente. ¡Qué emoción!. Las mulillas que están ahí. Trigo que sale mirando al presidente por si da la segunda, la primera está. Las dos orejas señores, las dos orejas para Curro. ¡Qué amoción!. ¡Cómo mató al toro de bien!.El toro estaba muerto... La gente le pedía que no descabellara, El toro se fue para fuera. No pudo aguantar más y entre las dos rayas de picadores cayó el toro y Trigo que tiene en sus manos las dos orejas para Curro Romero. Tarde histórica en la Maestranza. El toro nobilísimo de Juan Pedro Domecq. Salió el toro artista y el torero artista. Arrastran al toro y le dan una fuerte ovación. Fue un gran colaborador de Curro. Trigo con las dos orejas en la mano -el alguacilillo- y Curro que se va por ellas. Este es un momento histórico. Curro coje las dos orejas. Mira a Trillo, se las enseña al público. Las dos orejas en la mano derecha, casi las suelta. Las suelta, se las da a Alcalareño. No quiere tener despojos en la mano Curro Romero. El Arte no es eso. No son números. A Curro no le importan nada las orejas y se marcha a dar la vuelta al ruedo mientras llueven sombreros, flores. ¡Qué maravilla!.Curro Romero que emprende el paseíllo saludando al público. La gente en pie, moviendo y agitando los brazos. ¡Qué disfrute!, ¡Qué estética!, ¡Qué belleza!. Señores, ¡Qué despacito mueve los engaños!. Es otra dimensión... Las dos orejas de Curro. ¡Qué éxito!, ¡Qué nos alegramos! y nuestro amigo Paco con lágrimas en los ojos. No puede hablar. Está emocionado. Esto es el toreo amigos. Es el Arte efímero que permanece en la retina de quienes lo ven, de quienes tienen la suerte de verlo como mosotros aquí en la Maestranza. Es un Arte que nace y muere en el instante pero que permanece en el recuerdo de los hombres. No hay Arte más extenso que aquel que inspira a otros artistas, como es la tauromaquia. Artistas, escultores, pintores -como Botero que está emocionado en una barrera, casi llorando también-. Perpetuarán lo que sucede en el ruedo. Se inspiran en este arte que sale del corazón, del espíritu. Cuando se torea como Curro se olvida la técnica, el cuerpo...-¡pasa por aquí Curro, sonriente!- . ¡La ovación de Curro, qué maravilla, está contento y feliz!. Ha disfrutado al toro y con él lo han disfrutado los miles de espectadores que abarrotan la Maestranza. ¡Qué recuerdo imborrable de este 17 de abril, fecha histórica en la que Curro Romero cortó dos orejas después de parar los relojes, después de torear a cámara lenta!. Curro con los brazos abiertos, la montera en la derecha, el capote en la izquierda. La ovación enorme. Levanta los brazos Curro, tanto el capote como la montera. Quieren que de otra vuelta al ruedo, Curro dice que no, agacha la cabeza y se mete para dentro...¿Paco, estás más tranquilo? Paco está super-emocionado, tiene las lágrimas... Nos ofrecen agua. Todo el mundo está sonriente, se pegan abrazos, se miran unos a otros. Saben que ha habido un acontecimiento y que lo han visto. Faltan dieciséis minutos para las ocho de la tarde.
Muchos catalanes han olvidado el arraigo y afición taurina de Barcelona antes de la Guerra civil española, luego, durante la dictadura las corridas de toros, el Real Madrid y otras perlas de la cultura andaluza se convirtieron en sinónimos propagandisticos del regimen de Franco y los catalanes acabaron rechazando la fiesta por dicha asociación política. La afición por los toros ya nunca se recuperó y los cosos catalanes acabaron siendo un reducto para los turistas extranjeros ávidos de asistir a una fiesta ancestral.
En mi caso, solo he asistido en una ocasión a la plaza de toros de Barcelona, más con la intención de hacer un buen reportaje fotográfico que por mi identificación con la fiesta. Pero para mi los toros tienen nombre y apellido: mi tata Juana
Juana se incorporó como empleada doméstica en casa cuando yo tenía 3 años y se fue jubilada cuando cumplí los 17 años. Una mujer andaluza por los cuatro costados, de Lebrija en la provincia de Sevilla, muy cerca de Jerez de la Frontera. Juana es amada por toda la familia y para mis hermanos y yo es una referencia moral. Para todos nosotros es la mejor cocinera de nuestras vidas porque convertía la comida cotidiana en un festín incomparable... desde unas simples patatas fritas a todo el elenco de la cocina andaluza, del boquerón en esabeche al cocido, Juana representa la cocina tradicional mejor entendida y perfectamente elaborada gracias a los ingredientes más básicos; amor, sabiduría y practicidad.
Juana tenía sus aficiones personales muy definidas, cantaba flamenco y tonadillas en la cocina mientras guisaba, los viernes la televisión era para ella ya que le encantaba ver un concurso muy popular en España, el Un, Dos, Tres... Responda Otra vez... y por encima de todo, cuando se celebraba una corrida de toros en la televisión no se la perdía, especialmente si era en la Maestranza de Sevilla, la verdadera catedral del toreo.
Juana me enseñó a entender la faena del torero, me encantaba sentarme a su lado para ver como vibraba con los buenos muletazos y más de una vez lloró de emoción con las faenas de su matador favorito, Curro Romero
Hoy mientras escribía mis sensaciones sobre la Feria de Valencia recordé la figura de Curro Romero y como a través de los ojos de Juana pude vibrar con sus mejores tardes. Encontré su sitio oficial en internet http://www.curro-romero.com/ y en las ultimas dos horas he disfrutado con la épica de este matador mitológico.
¡¡¡ Va por ti, Juana !!!!!
La plaza se pone en pie. Toda la plaza inundada de pañuelos blancos, ¿De dónde salen tantos pañuelos?, ¿no dicen que ya no se usan?. Es falso, se piden las dos orejas. ¡Qué faenón de Curro a cámara lenta!, ¡Qué apuntes!, ¡Qué arte efímero!, ¡Qué belleza!. Se piden las dos orejas. No vemos el pañuelo del presidente. ¡Qué emoción!. Las mulillas que están ahí. Trigo que sale mirando al presidente por si da la segunda, la primera está. Las dos orejas señores, las dos orejas para Curro. ¡Qué amoción!. ¡Cómo mató al toro de bien!.El toro estaba muerto... La gente le pedía que no descabellara, El toro se fue para fuera. No pudo aguantar más y entre las dos rayas de picadores cayó el toro y Trigo que tiene en sus manos las dos orejas para Curro Romero. Tarde histórica en la Maestranza. El toro nobilísimo de Juan Pedro Domecq. Salió el toro artista y el torero artista. Arrastran al toro y le dan una fuerte ovación. Fue un gran colaborador de Curro. Trigo con las dos orejas en la mano -el alguacilillo- y Curro que se va por ellas. Este es un momento histórico. Curro coje las dos orejas. Mira a Trillo, se las enseña al público. Las dos orejas en la mano derecha, casi las suelta. Las suelta, se las da a Alcalareño. No quiere tener despojos en la mano Curro Romero. El Arte no es eso. No son números. A Curro no le importan nada las orejas y se marcha a dar la vuelta al ruedo mientras llueven sombreros, flores. ¡Qué maravilla!.Curro Romero que emprende el paseíllo saludando al público. La gente en pie, moviendo y agitando los brazos. ¡Qué disfrute!, ¡Qué estética!, ¡Qué belleza!. Señores, ¡Qué despacito mueve los engaños!. Es otra dimensión... Las dos orejas de Curro. ¡Qué éxito!, ¡Qué nos alegramos! y nuestro amigo Paco con lágrimas en los ojos. No puede hablar. Está emocionado. Esto es el toreo amigos. Es el Arte efímero que permanece en la retina de quienes lo ven, de quienes tienen la suerte de verlo como mosotros aquí en la Maestranza. Es un Arte que nace y muere en el instante pero que permanece en el recuerdo de los hombres. No hay Arte más extenso que aquel que inspira a otros artistas, como es la tauromaquia. Artistas, escultores, pintores -como Botero que está emocionado en una barrera, casi llorando también-. Perpetuarán lo que sucede en el ruedo. Se inspiran en este arte que sale del corazón, del espíritu. Cuando se torea como Curro se olvida la técnica, el cuerpo...-¡pasa por aquí Curro, sonriente!- . ¡La ovación de Curro, qué maravilla, está contento y feliz!. Ha disfrutado al toro y con él lo han disfrutado los miles de espectadores que abarrotan la Maestranza. ¡Qué recuerdo imborrable de este 17 de abril, fecha histórica en la que Curro Romero cortó dos orejas después de parar los relojes, después de torear a cámara lenta!. Curro con los brazos abiertos, la montera en la derecha, el capote en la izquierda. La ovación enorme. Levanta los brazos Curro, tanto el capote como la montera. Quieren que de otra vuelta al ruedo, Curro dice que no, agacha la cabeza y se mete para dentro...¿Paco, estás más tranquilo? Paco está super-emocionado, tiene las lágrimas... Nos ofrecen agua. Todo el mundo está sonriente, se pegan abrazos, se miran unos a otros. Saben que ha habido un acontecimiento y que lo han visto. Faltan dieciséis minutos para las ocho de la tarde.
oriol te ofrezco mi extenso archivo de fotografias taurinas... pase durante mas de tres anos registrando las fiestas taurinas en venezuela asi que tengo mas tresmil imagenes de la fiesta brava...
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