Desde hace tres números escribo en la revista Sambil un artículo intemporal sobre gastronomía. Hoy os ofrezco el primero de la serie.
Secrets Gourmands
El aceite de Oliva en Venezuela
Soy Catalán, de Barcelona, y eso desde hace unos años es una oportunidad inmejorable de vivir en el corazón de la alta gastronomía. Pero me gustan las emociones fuertes y abandoné hace 6 meses mi tierra natal para hacer realidad la ilusión de vivir en Venezuela y en lo profesional aportar la pasión que siempre me ha acompañado: la Gastronomía.
En estos primeros meses estoy descubriendo los ingredientes mágicos de la despensa venezolana. De la aportación del ají en el sofrito, al uso en la cocina de la parchita, la guanábana y, sobretodo, el coco en su relación sorprendente con el conejo o el chivo. Qué decir del chocolate y el ron, simplemente resulta el mejor embajador de la calidad del producto venezolano en el mundo.
En esta tierra de simbiosis cultural, mi propuesta de hoy: Casabe horneado con aceite de oliva virgen extra, sal, orégano y queso manchego; arepa al budare con aceite de oliva, sobrassada de cerdo ibérico y anchoas del cantábrico, también un lomo de Dorado con ajos macerados en aceite de oliva y perejil. De postre, chocolate Apamate de El Rey con carpaccio de pan tostado, aceite de Oliva y Flor de Sal....
Me van a disculpar, pero ¿qué seria de un catalán o un andaluz sin “su” aceite de oliva virgen extra?. Además de aportar un sabor inconfundible y excepcional en todo lo que toca, me transporta a lo más esencial de nuestra cultura. Desde niños nos dan cucharaditas de aceite antes del desayuno para no enfermar, y, junto al vino, es la base de la prestigiosa dieta mediterránea por las infinitas propiedades que atesora.
El secreto de la eterna juventud está en la composición del Aceite de Oliva conocido como Virgen Extra, es decir, puro zumo natural de aceitunas obtenido por la primera prensada en frío. Aquel aceite que no especifique claramente su virginidad jamás podrá contener Vitamina A, Tocoferoles como la Vitamina E que tiene una gran capacidad antioxidante, absorbe el colesterol malo y previene del infarto de miocardio, o los Polifenoles que evitan la formación de sustancias cancerosas.
El vino tinto es sinónimo de salud incluso en su envejecimiento en botella, pero en el caso del aceite de oliva que consume el venezolano es muy escasa esta posibilidad de éxito: las vitaminas o son inexistentes o se destruyen mucho antes de que el aceite haya llegado a los hogares. El mayor handicap del aceite virgen extra es la conservación de sus propiedades originales ya que resulta muy frágil a la oxidación por la acción del aire y de la luz. La oxidación no solo destruye rápidamente las vitaminas, también altera las cualidades del sabor enranciándolo.
Para evitar la actuación implacable de estos poderosos enemigos resulta necesario conservarlo en un envase opaco y hermético que retarde su inevitable destino. Según un estudio publicado por el Instituto de la Grasa de Sevilla (España), un Aceite envasado en plástico o cristal transparente pierde entre el 30% y el 40% de sus vitaminas en tan solo dos meses de exposición a la luz de un automercado. En estos envases no queda rastro de Vitamina E al año; a los tres meses solo la lata y el tetra brik mantienen los índices de oxidación por debajo de los límites permitidos por la Unión Europea.
Para todos aquellos que quieran disfrutar plenamente de las propiedades saludables y organolépticas del aceite de oliva, mi recomendación es muy simple: comprar un aceite que en su etiqueta especifique que se trata de un “virgen Extra”, buscar un envase de metal o tetra brik de nuestra marca de confianza, y si se trata de un envase transparente comprobar que la fecha de caducidad sea de unos 15 meses, es decir, de junio 2007 en adelante.
En cuanto consigas “cazar” este preciado ejemplar del mediterráneo, te invito a que aliñes el casabe al horno o que le eches un chorrito a la tableta de chocolate que tengas en casa. No dudes en escribirme tus sensaciones. Eso sí, una vez abierto hay que consumirlo en los tres meses siguientes, antes de que el oxígeno lo haya alterado por completo.
¡Suerte!
Secrets Gourmands
El aceite de Oliva en Venezuela
Soy Catalán, de Barcelona, y eso desde hace unos años es una oportunidad inmejorable de vivir en el corazón de la alta gastronomía. Pero me gustan las emociones fuertes y abandoné hace 6 meses mi tierra natal para hacer realidad la ilusión de vivir en Venezuela y en lo profesional aportar la pasión que siempre me ha acompañado: la Gastronomía.
En estos primeros meses estoy descubriendo los ingredientes mágicos de la despensa venezolana. De la aportación del ají en el sofrito, al uso en la cocina de la parchita, la guanábana y, sobretodo, el coco en su relación sorprendente con el conejo o el chivo. Qué decir del chocolate y el ron, simplemente resulta el mejor embajador de la calidad del producto venezolano en el mundo.
En esta tierra de simbiosis cultural, mi propuesta de hoy: Casabe horneado con aceite de oliva virgen extra, sal, orégano y queso manchego; arepa al budare con aceite de oliva, sobrassada de cerdo ibérico y anchoas del cantábrico, también un lomo de Dorado con ajos macerados en aceite de oliva y perejil. De postre, chocolate Apamate de El Rey con carpaccio de pan tostado, aceite de Oliva y Flor de Sal....
Me van a disculpar, pero ¿qué seria de un catalán o un andaluz sin “su” aceite de oliva virgen extra?. Además de aportar un sabor inconfundible y excepcional en todo lo que toca, me transporta a lo más esencial de nuestra cultura. Desde niños nos dan cucharaditas de aceite antes del desayuno para no enfermar, y, junto al vino, es la base de la prestigiosa dieta mediterránea por las infinitas propiedades que atesora.
El secreto de la eterna juventud está en la composición del Aceite de Oliva conocido como Virgen Extra, es decir, puro zumo natural de aceitunas obtenido por la primera prensada en frío. Aquel aceite que no especifique claramente su virginidad jamás podrá contener Vitamina A, Tocoferoles como la Vitamina E que tiene una gran capacidad antioxidante, absorbe el colesterol malo y previene del infarto de miocardio, o los Polifenoles que evitan la formación de sustancias cancerosas.
El vino tinto es sinónimo de salud incluso en su envejecimiento en botella, pero en el caso del aceite de oliva que consume el venezolano es muy escasa esta posibilidad de éxito: las vitaminas o son inexistentes o se destruyen mucho antes de que el aceite haya llegado a los hogares. El mayor handicap del aceite virgen extra es la conservación de sus propiedades originales ya que resulta muy frágil a la oxidación por la acción del aire y de la luz. La oxidación no solo destruye rápidamente las vitaminas, también altera las cualidades del sabor enranciándolo.
Para evitar la actuación implacable de estos poderosos enemigos resulta necesario conservarlo en un envase opaco y hermético que retarde su inevitable destino. Según un estudio publicado por el Instituto de la Grasa de Sevilla (España), un Aceite envasado en plástico o cristal transparente pierde entre el 30% y el 40% de sus vitaminas en tan solo dos meses de exposición a la luz de un automercado. En estos envases no queda rastro de Vitamina E al año; a los tres meses solo la lata y el tetra brik mantienen los índices de oxidación por debajo de los límites permitidos por la Unión Europea.
Para todos aquellos que quieran disfrutar plenamente de las propiedades saludables y organolépticas del aceite de oliva, mi recomendación es muy simple: comprar un aceite que en su etiqueta especifique que se trata de un “virgen Extra”, buscar un envase de metal o tetra brik de nuestra marca de confianza, y si se trata de un envase transparente comprobar que la fecha de caducidad sea de unos 15 meses, es decir, de junio 2007 en adelante.
En cuanto consigas “cazar” este preciado ejemplar del mediterráneo, te invito a que aliñes el casabe al horno o que le eches un chorrito a la tableta de chocolate que tengas en casa. No dudes en escribirme tus sensaciones. Eso sí, una vez abierto hay que consumirlo en los tres meses siguientes, antes de que el oxígeno lo haya alterado por completo.
¡Suerte!
Comentarios
Publicar un comentario