El Celler centenario Castell del Remei es bodega bandera de la D.O. Costers del Segre en Lleida y su etiqueta Gotim Bru el tinto que le ha dado fama por su reconocida relación de calidad/precio. Hace 12 o 13 años gracias a los grandes elogios de los prescriptores mundiales del vino, el "abogado" Parker incluido, se vivió un auténtico fenómeno que ayudó a poner en el mapa los vinos de las sub zonas de Lleida que componen esta denominación de origen catalana.
Después otros nombres han logrado igual fama y prestigio en una región donde conviven auténticos chollos, vinazos a muy buen precio con vinos de autor y gran categoría, todavía mucho por descubrir en las riberas del afluente más importante del vínico Río Ebro.
Castell del Remei Gotim Bru en cada añada modifica los porcentajes y participaciones de los varietales pero en general es un coupage que mezcla los grandes nombres ibérico y francés (el 2010 tempranillo, garnacha, cabernet sauvignon, merlot) con 10 meses de barrica americana y francesa para un resultado de intensidad media y buen equilibrio en todos sus valores de cata para jugar en amplios terrenos en lo que a maridar se refiere. Nunca queda mal.
Al ser un 2010 estaba ya empezando el descenso hacia su versión mas clásica pero fue digno compañero de un chuletón de buey. Espero pronto probar una añada más reciente ya que la vocación de este vino es ser disfrutado desde el momento en que aparece en las estanterías y no para largas guardas en botella. Si lo tienen, toca beberlo ya
La Cuenta: 7€
El Conteo: 6.5/10
Después otros nombres han logrado igual fama y prestigio en una región donde conviven auténticos chollos, vinazos a muy buen precio con vinos de autor y gran categoría, todavía mucho por descubrir en las riberas del afluente más importante del vínico Río Ebro.
Castell del Remei Gotim Bru en cada añada modifica los porcentajes y participaciones de los varietales pero en general es un coupage que mezcla los grandes nombres ibérico y francés (el 2010 tempranillo, garnacha, cabernet sauvignon, merlot) con 10 meses de barrica americana y francesa para un resultado de intensidad media y buen equilibrio en todos sus valores de cata para jugar en amplios terrenos en lo que a maridar se refiere. Nunca queda mal.
Al ser un 2010 estaba ya empezando el descenso hacia su versión mas clásica pero fue digno compañero de un chuletón de buey. Espero pronto probar una añada más reciente ya que la vocación de este vino es ser disfrutado desde el momento en que aparece en las estanterías y no para largas guardas en botella. Si lo tienen, toca beberlo ya
La Cuenta: 7€
El Conteo: 6.5/10
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